4/5stars

En cuanto a la tipología, el piso sigue siendo la residencia más habitual de los espaoles. Siete cada 10 en uno. Sin embargo, el apartamento, entendido como un piso de una sola habitación, refuerza su atractivo y, si actualmente tan sólo el 5% reside en uno, su demanda se triplica y se dispara hasta el 18%.

3/5stars

La situación ha cambiando mucho, y hoy las obras literarias espaolas e hispanoamericanas están por toda la Red, puestas por nosotros. Por supuesto, eso aumentará la difusión y conocimiento de esas obras, y cuando una obra se difunde, ya sabe lo que fructifica y se expande, y uno (por fortuna) pierde el control. A mí me gusta pensar en lo que pasó con la tradición literaria de Cervantes, con la que hoy se llenan la boca nuestros gobiernos: sencillamente, en el XVIII en Espaa el Quijote dejó de leerse, y sólo se publicó en ediciones baratas y malas.

5/5stars

Etc. El madrid tiene a los Sergios, Rudy, Ayón, Carroll,. No hay color!!! Dicho esto, es vital ganar el 4.

5/5stars

Un tuit, con foto incorporada, del Cerca adidas scarpe bianche Outlet eurodiputado del PP González Pons decía así días atrás: "Caballos vestidos Cerca adidas scarpe bianche Outlet de cebras. La moda llega a todas las especies". En la imagen, dos caballos a los que inmortalizó en un paseo por el campo en Bélgica..

3/5stars

A menudo el foco de debate se sitúa sobre el precio que es considerado por los participantes. Sobre el papel un precio Cerca adidas scarpe bianche Outlet considerado justo impediría la existencia de lucrosas ganancias y permitiría la supervivencia de la carrera. En los últimos aos la intensidad de la demanda empuja a una subida exponencial de precios que, en la mayoría de casos, se ve de largo compensada con los servicios a los cuales cuesta renunciar, aunque no cada domingo los necesitemos igual.

3/5stars

Por cierto este amigo o sea el celebre MAÑAS quiso emular al GRAN HOUDINI, se construyó el baul para escapismo en piscina donde lanzabamos dicho baul maniatado con sus correspondientes esposas y desde cual en los dos o tres minutos debia de salir indemne, existia un reloj que marcaba el tiempo que él estaba sumergido. Esta experiencia yo le aconsejaba que debiamos de ensayarla varias veces para estar seguro, pero él que era eso si ,muy cabezón no me hizo caso la presentamos ante público en dependencias de Maestranza en Albacete donde él trabajaba. Consecuencias, después de su inmersión pasado el tiempo prudencial que estimaba que debia de liberarse, viendo que no era así dí órden para elevar el subsodicho baúl en donde salió maltrecho mi buen amigo y colega